27 de julio de 2010

Dos gotas de agua

Me pregunto si para crear a Woopi Golberg se inspiraron en Predator.
Digo, si para crear a Predator se inspiraron en Woopie Golberg.


A las pruebas me remito

25 de julio de 2010

Páginas amarillas

Recién terminé de ver la peli de Verónica Guerin, una periodista irlandesa que se metió con los narcos a mediados de los noventa. Por aquel entonces, Irlanda atravesaba su mayor crisis de drogas, incluso llegaron a reportarse adictos de 14 años. Sí, de catorce. Sí, es grave, no entiendo tu cara de "ay, está lleno de pendejos que se drogan antes de los 14". Que los hay, los hay, que no te sorprenda, es lo grave.
La cuestión es que la mina se cagó en todas las advertencias que le hicieron y se mandó de una a investigar, denunciar y enfrentar a los grandes vendedores. El resultado es obvio, la hicieron boleta. Pero la mina se murió haciendo lo que tiene que hacer un periodista. Investigar hasta las últimas consecuencias.
Nada fue en vano. Miles de personas fueron a su velatorio y después ellos salieron a linchar a los asesinos. Sí, la doña, el sodero, el pueblo mismo. Incluso modificaron hasta la Constitución para confiscarle los activos a los millonarios vendedores. En el final de la peli, un locutor en off dice que no hay nadie en Irlanda que no recuerde dónde estaba cuando se enteró de la muerte de Verónica Guerin.
Me lleva a reflexionar sobre La liga, Animales Sueltos, Cámara testigo y toda esa sarta de programas de "Periodismo de investigación" que constantemente te muestran los pibes con merca, niños jugando con paco, pero que son incapaces de ir a buscar a los dillers.
Quizás sea demagogico lo mío, pero ahora se me hace que no es más que amarillismo. Te muestran el boom del momento y lo dejamos en eso. Sólo "vemos" lo que pasa, pero no investigan lo que hay detrás.
Les dejo el trailer de la peli, ya es viejita, pero no tiene desperdicio.


22 de julio de 2010

El marica

Escúchame, César, yo no sé por dónde andarás ahora, pero cómo me gustaría que leyeras esto, porque hay cosas, palabras, que uno lleva mordidas adentro y las lleva toda la vida, hasta que una noche siente que debe escribirlas, decírselas a alguien, porque si no las dice van a seguir ahí, doliendo, clavadas para siempre en la vergüenza. Escúchame.
Vos eras raro, uno de esos pibes que no pueden orinar si hay otro en el baño. En la Laguna, me acuerdo, nunca te desnudabas delante de nosotros. A ellos les daba risa. Y a mí también, claro; pero yo decía que te dejaran, que cada uno es como es. Cuando entraste a primer año venías de un colegio de curas; San Pedro debió de parecerte algo así como Brobdignac. No te gustaba trepar a los árboles ni romper faroles a cascotazos ni correr carreras hacia abajo entre los matorrales de la barranca. Ya no recuerdo cómo fue, cuando uno es chico encuentra cualquier motivo para querer a la gente, sólo recuerdo que un día éramos amigos y que siempre andábamos juntos. Un domingo hasta me llevaste a misa. Al pasar frente al café, el colorado Martínez dijo con voz de flauta adiós, los novios, a vos se te puso la cara como fuego y yo me di vuelta puteándolo y le pegué tan tremendo sopapo, de revés, en los dientes, que me lastimé la mano.
Después, vos me la querías vendar. Me mirabas.
–Te lastimaste por mí, Abelardo.
Cuando dijiste eso, sentí frío en la espalda. Yo tenía mi mano entre las tuyas y tus manos eran blancas, delgadas. No sé. Demasiado blancas, demasiado delgadas.
–Soltame –dije.
O a lo mejor no eran tus manos, a lo mejor era todo, tus manos y tus gestos y tu manera de moverte, de hablar. Yo ahora pienso que en el fondo a ninguno de nosotros le importaba mucho, y alguna vez lo dije, dije que esas cosas no significan nada, que son cuestiones de educación, de andar siempre entre mujeres, entre curas. Pero ellos se reían, y uno también, César, acaba riéndose, acaba por reírse de macho que es y pasa el tiempo y una noche cualquiera es necesario recordar, decirlo todo.
Yo te quise de verdad. Oscura e inexplicablemente, como quieren los que todavía están limpios. Eras un poco menor que no¬sotros y me gustaba ayudarte. A la salida del colegio íbamos a tu casa y yo te explicaba las cosas que no comprendías. Hablábamos. Entonces era fácil escuchar, contarte todo lo que a los otros se les calla. A veces me mirabas con una especie de perplejidad, una mirada rara, la misma mirada, acaso, con la que yo no me atrevía a mirarte. Una tarde me dijiste:
–Sabes, te admiro.
No pude aguantar tus ojos. Mirabas de frente, como los chicos, y decías las cosas del mismo modo. Eso era.
–Es un marica.
–Qué va a ser un marica.
–Por algo lo cuidas tanto.
Supongo que alguna vez tuve ganas de decir que todos nosotros juntos no valíamos ni la mitad de lo que él, de lo que vos valías, pero en aquel tiempo la palabra era difícil y la risa fácil, y uno también acepta –uno también elige–, acaba por enroñarse, quiere la brutalidad de esa noche cuando vino el negro y habló de verle la cara a Dios y dijo me pasaron un dato.
–Me pasaron un dato –dijo–, por las Quintas hay una gorda que cobra cinco pesos, vamos y de paso el César le ve la cara a Dios.
Y yo dije macanudo.
–César, esta noche vamos a dar una vuelta con los muchachos. Quiero que vengas.
–¿Con los muchachos?
–Sí, qué tiene.
Porque no sólo dije macanudo sino que te llevé engañado. Vos te diste cuenta de todo cuando llegamos al rancho. La luna enorme, me acuerdo. Alta entre los árboles.
–Abelardo, vos lo sabías.
–Callate y entra.
–¡Lo sabías!
–Entra, te digo.
El marido de la gorda, grandote como la puerta, nos miraba como si nos midiera. Dijo que eran cinco pesos. Cinco pesos por cabeza, pibes. Siete por cinco, treinticinco. Verle la cara a Dios, había dicho el negro. De la pieza salió un chico, tendría cuatro o cinco años. Moqueando, se pasaba el revés de la mano por la boca, nunca en mi vida me voy a olvidar de aquel gesto. Sus piecitos desnudos eran del mismo color que el piso de tierra.
El negro hizo punta. Yo sentía una pelota en el estómago, no me animaba a mirarte. Los demás hacían chistes brutales, anormalmente brutales, en voz de secreto; todos estábamos asustados como locos. A Aníbal le temblaba el fósforo cuando me dio fuego.
–Debe estar sucia.
Cuando el negro salió de la pieza venía sonriendo, triunfador, abrochándose la bragueta. Nos guiñó un ojo.
–Pasa vos.
–No, yo no. Yo después.
Entró el colorado; después entró Aníbal. Y cuando salían, salían distintos. Salían hombres. Sí, ésa era exactamente la impresión que yo tenía.
Entré yo. Cuando salí vos no estabas.
–Dónde está César.
–Disparó.
Y el ademán –un ademán que pudo ser idéntico al del negro– se me heló en la punta de los dedos, en la cara, me lo borró el viento del patio porque de pronto yo estaba fuera del rancho.
–Vos también te asustaste, pibe.
Tomando mate contra un árbol vi al marido de la gorda; el chico jugaba entre sus piernas.
–Qué me voy a asustar. Busco al otro, al que se fue.
–Agarró pa aya –con la misma mano que sostenía la pava, señaló el sitio. Y el chico sonreía. Y el chico también dijo pa aya.
Te alcancé frente al Matadero Viejo; quedaste arrinconado contra un cerco. Me mirabas. Siempre me mirabas.
–Lo sabías.
–Volvé.
–No puedo, Abelardo, te juro que no puedo.
–Volvé, animal.
–Por Dios que no puedo.
–Volvé o te llevo a patadas en el culo.
La luna grande, no me olvido, blanquísima luna de verano entre los árboles y tu cara de tristeza o de vergüenza, tu cara de pedirme perdón, a mí, tu hermosa cara iluminada, desfigurándose de pronto. Me ardía la mano. Pero había que golpear, lastimar; ensuciarte para olvidarse de aquella cosa, como una arcada, que me estaba atragantando.
–Bruto –dijiste–. Bruto de porquería. Te odio. Sos igual, sos peor que los otros.
Te llevaste la mano a la boca, igual que el chico cuando salía de la pieza. No te defendiste.
Cuando te ibas, todavía alcancé a decir:
–Maricón. Maricón de mierda.
Y después lo grité. Escúchame, César. Es necesario que leas esto. Porque hay cosas que uno lleva mordidas, trampeadas en la vergüenza toda la vida, hay cosas por las que uno, a solas, se escupe la cara en el espejo. Pero, de golpe, un día necesita decirlas, confesárselas a alguien. Escúchame.
Aquella noche, al salir de la pieza de la gorda, yo le pedí, por favor, no se lo vaya a contar a los otros. Porque aquella noche yo no pude. Yo tampoco pude.

Abelardo Castillo.
“Cuentos Completos“, Alfaguara, 1997.

20 de julio de 2010

Fragmento de un cuento que no existe

Ella, que todo lo convertía en una tragedia de proporciones bíblicas, me miró con sus ojos llorosos, mientras yo caminaba hacia la puerta. Sabía qué iba a decirme, ella sabía cual sería mi respuesta ante su llanto. Así que ahorrándonos obvias palabras, giré la rumbrada llave y la puerta gritó como un becerro cuando lo degollan.
Monté mi caballo y entre la bruma me alejé de aquella casa, en la cual ningún hombre pudiera ser feliz, no porque no quisiese, sino porque todo era una mentira.

15 de julio de 2010

Todo beim, todo legal...

Hay una gran espectativa por parte de la comunidad bloguera respecto del mega post que debería hacer en honor a la diversidad, a la ley del matrimonio para todos... pero estoy cansado de pelear en el face de C5N con gente ignoránte y ni da redundar ooootra vez en todo.
Si me acosté tipo 5, me quedé viendo el debate con frio y sueño, si estábamos hablando por fono justo cuando votaron, si te tiraba el minuto a minuto con Dani y le mando un saludo al Mono que se la re banco anoche.
Para hacerla corta, en honor a la gente que lucho su vida por esto, los que no llegaron a ver a la Argentina un paso más cerca de la igualdad (aunque nos falta mucho aún) y porque estoy cansado de los estereotipos de gays, aquí les dejo esta pieza deliciosa: Favio Posca, en "Apariencias".
ENSHOI!

8 de julio de 2010

Tesis sobre los saludos.

Últimamente me estado planteando mucho el tema del saludo, la importancia que realmente tiene y como saludamos. Llegué a estas conclusiones.

Hola!
La palabra "hola" no significa nada. Nada. Cómo definís el significado de "hola"? No se define. No se define porque no hay nada que decir. Es una palabra vacía. Da un pie, para empezar la charla, pero es francamente una muletilla. Y no me vengan con la RAE y definiciones de diccionarios, porque seamos francos, no significa nada. Tal vez simbolice algo, pero no lo significa.

Face vs tech
La necesidad del saludo puede variar según el medio que se está empleando. Ponele, cara a cara uno siempre saluda. Uno llega del trabajo cansado, arrastrando los pies y con la lengua afuera, después de subir las escaleras y embocar las tres llaves que tiene la puerta y con su último aliento...
-Buenas...

Y ahí la Mimi que te había dejado todo pronto se acerca a la mesa, que quedo sólo para vos (porque llegando después de las once, cenás solo, obvio) y con todo su amor de madre te tira
-Hola Juanito, cómo estuvo hoy?
-Bien, lo único que no di a basto hoy, encima se rompió la máquina grande, la que hace las dobles más rápido. Imaginate que estuvo todo el día lleno, ni un descanso. Pobre Mariela, hizo el mate se tomó sola todo el termo.
-Pobrecito, que cansado que estás. Acá te dejo la comida, pero yo me voy a acostar porque también estoy cansada, no te molesta?
-No, ma, está bien. Dejo las cosas en la pieza y vengo. -(muaaaak) 'ta mañana, que descanses...
Baja el telón.

El saludo no tuvo mucha significancia. De hecho, casi todo el diálogo es saludo. Pero al estar así, cara a cara, uno no puede no saludar, queda feo. Aparte te sentís mal, como que algo falta. Por más que llegues hecho un zombie, saludás.
Ahora, con la compu es distinto. La compu te exonera de todos los cargos. Vos prendés la compu antes de ir a cenar, cuando dejás las cosas, comés, volvés y ya la tenés lista. Tons te sentás, todo pepón después del banquete y empezás a comunicarte con la gente que te interesa y que está disponible.
Acá es donde se dividen los caminos. Se puede o no saludar, dependiendo de a quién se hable o para qué se hable.
Si vas a hablar con tu myloveyou, sí o sí va con saludo. Y saludo tierno.
-Hola mi amor, como estás?
-Hola Fuaaaan! volvíste... te estaba esperando para hablar un ratito con vos. Cómo estás?

Y ahí puede seguir la charla felizmente.
Si vas a pelear con tu myloveyou, la charla tiende a ser más un...
-Ey, estás?
-Hola Fuaaaaaan! volvíste... te estaba esperando porq...
-Gracias por responder el mensajito hoy, un amigo sos.
-??
-Ocho veces te escribí a ver si compraba el pasaje.

-No tenía el celu, Juan (nótese como ya se cambia el apodo por el nombre)

Y el resto de la charla son excusas y más peleas hasta que todo de pronto está bien de nuevo y son felices.
Con los amigos, las charlas pueden variar, dependiendo si estás hablando por hablar o por contarle algo urgente.
-Hola bombonooooo
-Hola pe! como estás?

-Bien vos? todo lindo?


El resto es lo de siempre.
Si es algo urgente:
-Daniiiiiiiiiiii! (un segundo después)
-Daniiiiiiii, estás?
-EEEEEUUUUUU!
Zumbido

-Hola pe, cómo estás?

-No sabés!!!

Nótese como se obvia el saludo y se pasa a lo importante. Es posible que cuando termine lo importante, le preguntemos a Dani como está y ahi sí se vuelve al saludo. Se usa la frase
-Vos cómo estás?

Ni hablar que por mensaje de texto uno saluda sólo si escribe para saber como anda la otra persona, pero si lo que querés es organizar algo, preguntar algo o pedir un práctico, no se saluda. Pero no se saluda porque gasta crédito y aparte desvía la atención de lo otro:
-Ey, Dai, cómo estás, como llegaste a tu casa? che, vos tenés el punto 5 del trabajo de la Forgués?(profesora de Contabilidad) -Yo bien, tengo una pachorra... debe ser la resaca...
-!!!! (desesperación porque nunca me dijiste nada del trabajo)

Claro está que uno quiere el punto 5, no saber como está. Para evitar tener que enviar otro mensaje, sacamos el "cómo llegaste" y asunto resuelto.

El Autosaludo
El autosaludo es la forma más pelotuda del saludo. Es lo más bajo que hay en cuanto a materia de saludaje. El autosaludo es el reflejo que tiene la gente a responder un saludo, pero lo hacen sin escuchar, por eso molesta.
-Buenas...
-Bien, vos?

-?????????


En la fotocopiadora pasa muy seguido. Llega un cliente y uno para señalarle al cliente que estás por atenderlo (otro uso del saludo) dice:
-Hola, si...
-Bien.

En la calle también sucede. Cuando al pasar ves a un conocido y le decís
-Adiooooooos
-Hola!

-(te dije "adiós, estúpida, respondé 'adiós'" o no te saludo mal, mogólica)

Detesto el autosaludo.

Optimismo

A Sergio le llama la atención (yo nunca me había dado cuenta) que mucha gente que me rodea te pone un "pero" en el saludo. Caso típico:
-Cómo andás?
-Pero bien, vos?

Vieron? no les suena común?
-Buenas, todo lindo?
-Pero si, che, vos?


Supongo que debe ser una abreviación.
-Cómo estás?
-Mamá volvió a quebrarse la cadera, la abuela sigue con su tuberculosis y de papá no sabemos nada desde que se fue a comprar puchos a la esquina, hace quince años, pero yo bien, dentro de todo...

En el fondo, un poquito de optimismo. Podemos tenerla en contra, pero estamos bien.

Respuesta equivocada
Cierro este posteo con una gran verdad. Uno siempre está bien. Por vergüenza o por paja, pero uno siempre está bien.
-Qué hacés, tanto tiempo!
-Acá ando, vos?

-Yo vine de Punta la semana pasada, mirá el color que tengo, vos cómo andás?

-Yo bien, bien, por suerte. Trabajando a full...


No le vas a decir que estás cansado, no das más, encima forro del culo que no hace nada y se va de vacaciones mientras que vos te quedás como esclavo del sistema capitalista hundiendote más y más en toda la mierda que... no, no, no dá. Entonces decís "bien".
Aparte, y ahora sí termino, esta publi, no se equivoca...


6 de julio de 2010

Cortitas y al pie

Desayuno
Que te falte leche, azucar o algún panificado a la hora de desayunar, ya te caga el día completamete, y eso no tiene discución.

Si las matemáticas no me fallan
Dos y dos son cuatro, cuatro y dos son seis, seis y dos son ocho y ocho dieciseis... por ahora me sigue dando bien la caja, eso me agrada.

Mumma viajera
El finde me voy a Fray Bentos, ahora que levantaron el puente y que tengo conocidos de aquellos pagos, iremos de visita. Para Pauly que lo mira por TV (te quiero pau :P)

LegaLegalización
La semanita que viene me aprueban el casamiento gay, un pequeño salto para el gremio, un gran paso para la humanidad. Y en caso contrario, se dice que ya la Corte Suprema falló a favor de los chicos que habían presentado el recurso de amparo, dejando la jurisprudencia necesaria para que ya todos puedan casarse. Lalala.

Placita
A todos los que recuerdan cuando quise prender fuego a los chicos que jugaban el la plazoleta que pusieron abajo de casa, les cuento que finalmente un vecino arrastró (literalmente) todos los juegos hasta otra parte del parquecito, así que me sacaron la placita y yo no tengo que matar a nadie. Viva mi comunidad.

Morbo laboral
Postear desde el trabajo, tiene otro gustito, eso es irrefutable.

Velorios
Lo único que pido cuando se muera uno de mis viejos o uno de mis abuelos, es que el Dani esté ahí para que hagamos una y otra vez escenas de Esperando la Carroza. Creo que para pasar el momento sería muy divertido o al menos aliviaría bastante.

Enie que te quiero enie
El teclado de la compu me trae la virgulilla aparte. Así que para hacer la letra Ñ tengo que hacer el mismo trámite que se hace para poner un acento. A su vez, la función principal de la tecla es el acento que se usa en francés, el que va para el otro lado, serìa como asì. Por lo que debo apretar Shift para poner la virgulilla, con lo cual para hacer la Ñ tengo que hacer el mismo trámite que para poner las diéresis. Y encima la tecla me queda re a tras mano, del lado izquierdo de la barra espaciadora y me cuesta horrores llegar ahí. Ergo, escribo "te extranio" que es más fácil.

Velorios ll
Cuando hablo de muertes que no pasaron la gente se asusta y me dice que no hable de esas cosas. Yo pienso que está bueno ir viendo que pasaría si... Obvio que en la situación capaz que es distinto, pero yo no le estoy deseando la muerte a nadie, solo me voy preparando para cuando pase.

Citas citables
Aparte de mis problemas virgulillísticos, las comillas (") se hacen con Shift más la tecla que tiene el acento, pero todavía no aparecen, sino que tengo que mandarle barra espaciadora o meter consonante, porque si pongo una vocal (incluyendo a la no vocal y) me sale la diéresis. "PARAÜAS". En el msn, cuando hago una cita, nunca cierro las comillas.

Del Gremio
Cualquier chico que tenga en su Face un álbum de fotos que se llame "Varieté" es axiomáticamente homosexual. Es clavado (valen todas las redundancias).

Hétero
La otra vez que las fotocopiadoras no paraban de romperse y trabarse, le dije a una de las chicas de Higiene y Seguridad "Es que a éstas hay que mimarlas un poco, si no las acaricio un poquito, no me hacen caso". Y ella, que es bastante buena onda, me responde "Como a toda mujer..."

La frase
Una vez Luly me dijo "Uno es dueño, pero también es esclavo de sus palabras"

4 de julio de 2010

24 LAS BOLAAAS


A nadie le dan 23 minutos para terminar de garchar, que te maten a tu amante, llevarla al hospital, que la operen, que te digan que se murió, hacer el duelo, volver a tu casa, bañarte, vestirte e ir a la audiencia de un mafioso en la corte... ni McGiver podría...

la necesidad tiene cara de hereje....


y la violencia, de Batman

3 de julio de 2010

Despertare

Hoy me desperté y todo había cambiado. Hoy me desperté como en un lugar distinto...

2 de julio de 2010

Les presento... a la competencia

Cuando quise poner como dire molestiaaparte.blogspot.com me saltó con que no se podía porque ya existía. Revisé a ver que había en tal blog y es un pobre esclavo laboral que durante un (1) post habla mal de su jefe y fin. Que triste que usen una url tan buena para un blog tan pequeño.

Después pensé en meterle un guión y fue, pero www.moletia-aparte.blogspot.com también ya estaba ocupada. Y pensé por algún momento que mi supercerebro ya no era tan inteligente y que si bien yo no lo conocía, tampoco fui capaz de crear algo que antes no haya sido creado. Me tomé también la molestia de ver que había allá y me topé con un blog muy bueno, tiene onda, le vi potencial. De hecho me di cuenta que es re viejo, con post desde el 2006, pero que desde el año pasado no publica. Pero su archivo es bueno.

En fin, les dejo entonces un link hacia el otro molesto, para que pasen y vean...

1 de julio de 2010

En los tiempos del skype...

juan manuel: hola...
juan manuel: estas?
sergio.ivan: holafuancito
sergio.ivan: no me andalabarra espaceadora
juan manuel: jajaaa
juan manuel: es muy graciosooo


Cosas que pasan en el chat del skype...

Rosario dice Sí


Encontré esta fotito. La placa que pusieron en Rosario (Santa Fe) el día del Orgullo Gay.
Diganme si no sienten que estamos avanzando...

La igualdad tiene los colores del arco iris

Si querés ver fotos del fesitval por la igualdad, te recomiendo estas.

REBORN

Finalmente me he mudado. Una nueva casa tiene aires de inspiración que nos llenan de alegría.
Finalmente he unido mis dos blogs, el del gremio y de siempre, porque me di cuenta (y como puse en el primero) no soy gay en un sí y en el otro no. Aparte nunca sabía cual era más apto para uno o para el otro. Así que haciendo todo uno, me siento más tranqui, más feliz y con nuevas ganas de escribir. Qué escribiré, ah, no, eso no sé, pero ahora podré hacerlo cuando sepa, sin tantas vueltas y ustedes pueden leerlo sin advertencias jajaja.
Bue, desde la nueva casa, con todo y olor a pintura fresca, les mando un saludo.